lunes, 7 de enero de 2008


No comiò las algarrobas...


¿qué impresionante es leer con atenciòn las escritura? Anoche en el culto se exhortó sobre el clásico pasaje bíblico del "hijo pródigo". Confieso que en más de una ocasión mi mente divagó por tantos lares...pero bueno.

Cuando terminó el culto mi cuñado me dijo: leíste con atención el texto? yo le dije: sí, pero sin pensarlo mucho, era un clásico. El punto es que Él me hizo detenerme en el momento en que el joven "deseaba comer de las algarrobas...pero nadie le daba"...Deseaba, nadie le dio, es decir, él nunca comió de este alimento. Mi cuñado me hizo ver en el cuidado de Dios hacia su hijo, en cómo Él no permitió que cayera tan bajo...será verdad...¿cuál habrá sido el propósito del Padre? él no comió...no lo hizo ¿qué verdad hay oculta en esta parte? De todas maneras la tesis de mi cuñado me parece maravillosa. Yo creo ciegamente en el amor de Dios. Creo y sé que el tiene cuidado con los suyos, incluso más con los que son infieles.

2 comentarios:

Omar Audicio dijo...

Holaaaaa

Yo creo que no le daban algarrobas porque hasta para los cuidadores los cerdos eran, en cierto sentido, más valiosos que el hijo pródigo.

Los seres humanos muchas veces consideramos más valiosos a los animales que a las personas. Si no, mira a los ecologistas.

ya, bendis!

Anónimo dijo...

hola, sabes que imagino en este momento, no a uno si no a cientos que están como el hijo prodigo, por que? primero por que no se les enseño a disfrutar de las riquezas que el padre tiene para nosotros; yo vengo de esos tiempos de legalismo en que disfrutar era un pecado...y el alejarse de la casa del "Padre" era común en los jovenes, y terminar deseando algarrobas como tu dices, yo creo respondiendo a lo que has escrito que es una regla el hecho que aquellos que huimos y nos alejamos nos pasemos la vida deseando pero sin poder alcanzarlo aun las pequeñas cosas, pues aún esas pequeñas cosas, insignificantes, se nos niegan y en ese acto vemos la misericordia de Dios, forzandonos a volver al hogar donde hay abundancia...bueno ya escribi mucho aquí.-

un abrazo.-